24 julio 2007

La saga de Terramar, de Ursula K. LeGuin


Esta saga es una gozada de principio a fin, me mantuvo interesado en la trama y no destiñó en ningún momento. Como nota curiosa, debo añadir que no soy lector de fantasía, pero esta saga se merece toda mi atención.

Comienza con “Un mago de Terramar”, en donde se narran las aventuras y desventuras de Ged más conocido por su apodo de Gavilán, quien parte a la Escuela de Roke para aprender magia (sí, antes de Harry Potter ya existía una Escuela de magia, ¿no lo sabían?). Allí empieza a descubrir sus habilidades y su inexperiencia y juventud le juegan una mala pasada, lo cual redundará en su alejamiento de la Escuela para internarse en un viaje que lo transformará completamente.

La historia prosigue con “Las tumbas de Atuan”, en donde un Gavilán más maduro y precavido se encuentra con Tenar, una joven sacerdotisa del culto a los Sin Nombre, en un laberinto mortal del que nadie ha escapado. La historia es sencilla en su planteamiento, pero llena de sabores y sensaciones de sus personajes, pues hace que la sacerdotisa cambie paulatinamente su modo de pensar.

En el tercer libro, “La costa más lejana”, asistimos al encuentro entre el Archimago Gavilán y Arren, príncipe de Morred, quienes se embarcarán en una aventura que intentará resolver el misterio que se cierne sobre la magia en Terramar. Hay dragones, magia y un extraño no-muerto que se conjugarán en un final de lo más inesperado por sus consecuencias para el Archimago.

“Tehanu” continúa la historia y cuenta la historia de Therru, una niña quemada que es salvada por Goha, la sacerdotisa que aparece en el libro anterior, pero que ya ha madurado y ahora es viuda y madre de dos hijos. La mujer adopta a la criatura y poco a poco se nos desvela una realidad acerca de los humanos y dragones. Es una historia de esfuerzo y sacrificio, vista desde la perspectiva de una mujer que ha renunciado a lo mágico para tener una vida normal…, hasta que las circunstancias la obligan a retomar ese camino de una manera inesperada. También aparece Ged, continuando lo acontecido al final del libro anterior, un Ged que ya no es Archimago y que ha perdido toda su capacidad para usar la magia.

“En el Otro Viento” se narra la aventura de la mujer de Gavilán, quien junto a su hija adoptiva Therru se embarcan con el príncipe Arren en una travesía que intentará recomponer el perdido equilibrio entre humanos y dragones. Como siempre, Ursula K. Leguen nos describe muy bien a sus personajes, entremezclándolos de manera maestra con la trama, una trama en donde la magia y lo fantástico no están ajenos, pero no por ello son atosigantes.

Nota: Si alguien busca libros con batallas épicas, princesas curvilíneas y héroes legendarios, entonces se ha equivocado de historia. Una saga para leer tranquilo y relajado, no apto para quienes desean acción trepidante y hechizos al por mayor o grandes duelos de espadachines superdotados. Y —no puedo evitar el mencionarlo— la miniserie/película larga que exhibió Hallmark Channel basada en los dos primeros libros se parece en casi nada a lo que narran las novelas (en buen chileno: vale callampa).

6 comentarios:

Gabriel Mérida dijo...

Siempre he querido leer la saga de Terramar, para compararla con los mundos de Tolkien, Ende y Lewis, a quienes creo que podría destronar. De ella sólo he leído un par de magníficos y callados cuentos, y una novela demasiado madura para ser olvidada, "La mano izquierda de la oscuridad".

saludos,

Gabriel M.

::: Isis ::: dijo...

No lo conocia... pero es un buen dato lo anotare en mis libros pendientes de leer.


Saludos Teobaldo!!!

Que estes muy bien.-

A.C.C. dijo...

Definitivamente, voy a buscar estos libros.

Justo ahora estoy leyendo "La mano izquierda de la oscuridad"...y me tiene cazado.

saludos!

Anónimo dijo...

Hola Teobaldo, te sigo por sedice, que te he visto ya muchas veces escribiendo, también, por allí...

Me ha parecido interesante que hables de esto porque me hice con los tomos del libro hace ya unos meses y aún están en la estantería (no te imaginarías la de cosas que tengo -y cada vez más- por leer). Y como hace ya algo de tiempo que no leo fantasía (me he llevado un buen tiempo con Kafka, aunque sea fantasía realista y mágica, desde otra perspectiva y en distintas dimensiones, y muchos otros autores ) quizá, después de oír ya tantas buenas cosas sobre esta saga, me meta de lleno a ella. Porque también tengo las mágicas obras de George RR Martín, pero me temo que son muy densas e interminables, y aún mi tiempo no quiero usarlo para todo ello, a pesar de que sé, de buena mano, que son obras maestras.

En fin, no te aburro más.

Interesantes palabras.

Una sonrisa, compañero.

Anónimo dijo...

Tienes toda la razón, Le Guin es MUY SUPERIOR a la tal Rowlings y sus H.P, creía que era el unico que opinaba así y me alegro de ver que hay otro chileno en la misma onda.

sigue escribiendo y sacando libros yo te compraré el libro que siga a estos.

Saludos.

Anónimo dijo...

bueno solo queria decir q de las andansas de ged se aprende muchisimo.
muchisimas gracias